El proceso de Gareca recién empieza, sin triunfalismos ni falsas promesas, debemos ser cautos, sin embargo este lunes todos tenemos derecho a ilusionarnos y esperar un triunfo de la bicolor.
Perú ha logrado su clasificación
a semifinales de esta copa América, el rival, ni más ni menos que el anfitrión,
Chile. Y aunque lo que se debe evaluar es el funcionamiento, los resultados
consolidan un proceso, lo potencian y sustentan, por eso es plausible lo
logrado hasta aquí y sin duda genera ilusión una victoria ante los mapochos.
Ciertamente con Markarian se
alcanzó un tercer puesto en Argentina y posteriormente tuvimos unas eliminatorias
desastrosas, nada quita que no vuelva a pasar lo mismo, pero debemos darle
siempre el beneficio de la duda a un nuevo proceso. Los jugadores no son los mismos
y quienes repiten están en momentos diferentes de su desarrollo.
Así que este lunes, más allá de
lo que serán las eliminatorias, el equipo nacional debe concentrarse en el
momento que vive hoy, una semifinal con el clásico rival, un rival que es
favorito ciertamente, por ser local y porque tiene un trabajo largo en sus
espaldas, pero que en el torneo ha demostrado limitaciones. Es difícil ser
imparcial cuando hablas de tu propio país pero, si bien es cierto Chile inicia
con ventaja, esta es mínima y será sin duda un partido cerrado.
Más allá de lo que pase en esta
semifinal y las eliminatorias que se vienen, hasta aquí, Gareca ha tenido un
trabajo destacado, desde su respaldo a Cueva, poner a Farfán de media punta, o
acomodar a Ascues como central. Veremos luego si a la larga se logra la ansiada
clasificación, por el momento solo queda disfrutar de esta semifinal y desear
una victoria peruana.