Gracias Roberto Carlos

Se retira Roberto Carlos del fútbol y sin duda me embarga la nostalgia, de aquellos años de adolescencia cuando mi gusto por el fútbol se empezó a cultivar, los primeros partidos internacionales, los del súper Real Madrid de Del Bosque, Corea –Japón 2012 y el penta de Brasil.

De lejos, el mejor lateral izquierdo que haya visto, por cierto que siempre han sido escasos, actualmente creo que lo son más aún. La capacidad para mantener el orden defensivo y la potencialidad de sumarse al ataque con velocidad y sobre todo, criterio, hicieron de Roberto Carlos un modelo en el puesto. 

Inició su carrera en el Atlético Mineiro, tan solo tenía 19 años, de allí en adelante todo fueron glorias y títulos para el zurdo jugador, Champions con el Real, Intercontinentales, también con el equipo blanco y obviamente el más importante de todos el campeonato mundial. Una carrera impecable que se fue apagando a medida que perdía la potencia para ese ir y venir constante.

Calígula

Este es el nombre que recibió el famoso gol que metió ante Francia, previo al Mundial que se organizaría en ese país, hasta hoy nadie ha podido y seguramente jamás podrán repetir semejante hazaña. Ese gol es imborrable, pero hubo otros, decenas de cañonazos imparables que salían disparados de su pie izquierdo, quizá uno de los jugadores que más fuerte le pegó a la pelota alguna vez.

A los 38 años se retira de las canchas, su último equipo FC Anzhi Majachkalá de Rusia, dónde incluso está dando sus primeros pasos como entrenador. Se retira un grande del fútbol mundial de todos los tiempos, recordando que como todo en la vida, el fútbol va dejando a las personas y a los recuerdos en el pasado y trayendo futuras promesas y alegrías.